16 de mayo de 2010

Un poco de la historia antes de la revolucion





Apenas se ha iniciado el siglo XIX y ya, desde hace un tiempo (desde mediados del siglo anterior) soplan vientos de cambio en las viejas monarquías europeas : hay revoluciones económicas, revoluciones ideológicas y revoluciones políticas.
El continente americano en su segmento Sur, Central y parte del Norte era dominio español desde hacía tres siglos.
Los reyes de España habían creado para la administración de estos territorios, instituciones como las Capitanías y los Virreinatos.
Nuestro territorio junto con lo que hoy es Bolivia, Paraguay y Uruguay y hasta parte de Chile, formaban el VIRREINATO DEL RÍO DE LA PLATA , cuya autoridad máxima, el virrey, residía en la ciudad de Buenos Aires.
Incorporen un mapa del Virreirnato del Río de la Plata
M. Moreno
Pero todo este proceso de preparación tiene un momento culminante que desencadena el estallido. Y, para descubrirlo debemos volver a Europa:
Dos Titanes se disputan el dominio del viejo continente:
* El Imperio Napoleónico, creado por Napoleón Bonaparte hacia 1805, controla todo el continente.
* Gran Bretaña, dueña de las rutas comerciales le impide el acceso al mar.
En ese contexto España empieza por brindar su apoyo a Francia, soportando terribles derrotas ante la flota británica.
El control español de América dependía de una Armada, la cual fue, por entonces, diezmada por los ingleses.
Hacia 1808, pues, los sucesos empiezan a adquirir un giro vertiginoso.
Hay dos Españas en la Península Ibérica:
Una ocupada por el ejército napoleónico y por tanto, sometida a José I.
La otra, la España de la resistencia, que desconoce al impostor y se organiza para luchar.
Al mismo tiempo los territorios no sometidos deciden la creación de un nuevo poder: las “juntas de Gobierno” que se reconocen depositarias de la “soberanía popular”, porque representan al rey legítimo (Fernando VII), cautivo de Napoleón.
¿Qué pasa entonces en América?
Hacia 1809 llega al Río de la Plata el Virrey Cisneros, designado ya no por el Rey, sino por la Junta. Central de Sevilla.
Se sabe que trae algunas sugerencias sobre cómo manejar el comercio en el Puerto de Buenos Aires. Claro, ahora resulta que la Gran Bretaña ya no es enemiga, si no su aliada, en la lucha contra Napoleón. Se habla en Buenos Aires de “Libre Comercio”…
También, en ese mismo año de 1809, las cosas se ponen violentas en los confines de nuestro virreinato: algunos criollos, en ciudades de la actual Bolivia empiezan a pedir que los funcionarios españoles sean reemplazados por Juntas integradas por americanos.
La respuesta de Cisneros fue brutal: sangrienta represión para los que encabezaron el reclamo.
Y está por empezar este bendito año de 1810…

la formacion del primer gobierno patrio




Hacia principios de 1810 los patriotas habían consolidado sus posiciones. Esperaban con ansiedad la caída de la Junta Central en España: esa era la señal para tomar el poder en Buenos Aires.
Las reuniones de los revolucionarios se multiplicaron en los primeros meses del año. Se sabía que el Jefe de Regimiento de los Patricios, Cornelio Saavedra, subordinaba su accionar a los acontecimientos peninsulares, que las milicias criollas no aceptarían la dominación de Bonaparte y que hasta los ingleses habían comprometido su apoyo en caso de que los criollos decidieran tomar el poder!!!
El 13 de mayo arriba al puerto de Montevideo una fragata británica con la noticia más esperada: la Junta Central había dejado de existir y un débil Consejo de Regencia, acosado por las tropas napoleónicas, intentaba mantener la representatividad del pueblo español. Cisneros hizo todo lo posible por impedir la llegada de esas novedades a Buenos Aires...
Pero los rumores corrieron rápidamente y los porteños ya estaban deliberando en los lugares públicos: si Fernando estaba cautivo y la Junta Central había sido disuelta
En la noche del 19 de mayo, Saavedra, Chiclana, Paso, Vieytes y Belgrano se reunieron en la casa de Rodríguez Peña. Decidieron que el Cabildo debía exigirle a Cisneros que convocara a un Cabildo Abierto para la formación de una junta autónoma, al estilo de las españolas.
Al día siguiente, Castelli y Rodríguez Peña presentaron ante el virrey dicha solicitud. Cisneros intentó resistirse, pero ante la insistencia de los patriotas, y sabiendo que no contaba con la simpatía de los jefes militares, terminó por ceder, diciendo. “Hagan ustedes lo que quieran”.
El 21 de mayo los capitulares decidieron convocar oficialmente a la “parte principal y más sana” del vecindario al Cabildo Abierto.
La jornada del Cabildo Abierto fue la más trascendente de esta agitada semana. Allí se discutió acaloradamente y se manifestaron los sustentos ideológicos del proceso revolucionario.
Finalmente, el 25 al mediodía, es el propio Cisneros quien decide renunciar, presionado por la acérrima oposición de los grupos criollos. Por la tarde, a pesar del frío y de la llovizna del otoño porteño, queda configurada la Junta de Gobierno Patrio que jura en nombre del rey cautivo, Fernando VII. Repiques de campana, salvas de artillería, vivas y gritos saludan el acontecimiento....

Día de la Patria Argentina




Hoy, 25 de mayo, es una de las fiestas patrias argentinas más importantes, en la que se celebra el aniversario de la Revolución de Mayo, que tuvo lugar en 1810 y fue crucial para la independencia y formación del país. De ahí viene el nombre de la famosa Plaza de Mayo, que fue el escenario de tan importantes hechos. Algo característico en las fechas patrias argentinas es el uso de la escarapela, especie de rosetón de tela con los colores de la bandera (como se ve en la imagen de arriba) que uno se pone con un alfiler sobre la ropa, como un broche, para lucir su "amor a la patria", costumbre argentina que se mantiene hasta nuestros días. Por la calle, en los colegios y por todas partes, vemos al pueblo orgulloso luciendo su escarapela celeste y blanca.

el comienzo de la rev de 1810




1810: en el Virreinato del Río de la Plata sucede la Revolución de Mayo; ante la inestabilidad de España, un grupo de revolucionarios deponen al virrey y organizan la Primera Junta, el primer gobierno autónomo de lo que sería Argentina.
La revolución de mayo no significó la independencia de España: la Primera Junta aún gobernaba en nombre del rey de España que había sido depuesto en lugar de someterse a la autoridad de José Bonaparte. La declaración de independencia argentina tuvo lugar durante el Congreso de Tucumán del 9 de julio de 1816.
Los acontecimientos de la Revolución de Mayo se centran en una semana conocida como Semana de Mayo, transcurrida entre el 18 de mayo de 1810, cuando se reúnen los primeros grupos revolucionarios, hasta el 25 de mayo, fecha de asunción del primer gobierno rioplatense independiente de España.